COLOR

COLOR

martes, 26 de marzo de 2013

Los cambios en la vida, nunca son de un día para otro, de repente, te sientas en el suelo, buscas un caramelo, lo introduces en la boca y chupas. Los sistemas gustativos se aceleran y recuerdas.
El mejor año de mi vida no encendí la televisión y piensas: fui yo, sin adoctrinamiento. 
Llegan nuevos tiempos y algunos agradecen al gran físico  Tim Berners-Lee la posibilidad de comunicarse sin los lobbies establecidos, que ilusos, la red los ha convertido en gigantes, hasta tú puedes pensar que pertenezco alguno.
La red, nunca mejor dicho, también es la trampa que las arañas fabrican para cazar a sus presas. 
Sólo tú estás capacitado para no estar, ni siquiera aquí. Os confirmo que un nuevo mundo está naciendo y no está en la red. Son muchos los que se quieren borrar y no pueden. Introduces cualquier dato en los buscadores y sales comiéndote los mocos cuando hiciste la primera comunión.
En menos que canta un cuco lo que se llevará es el no estar. Posiblemente en alguna socarrena ya habrá alguien que esté haciendo cebillas, ó dalles, ó colodras ó páginas web que borren la existencia ficticia.
No es difícil, desenchufa, es tu vida, vívela tú, y no permitas que la vivan por ti. 
Recuerda, tienes cerebro y le gusta pensar, abre el carburador y deja que entren tus neuronas.
El mayor peligro que tiene la sociedad hoy, como ayer y lamentablemente como siempre, es que no ejercita el ejercicio mental. Si el nuevo tiempo viene y vendrá los gimnasios de hoy se convertirán en centros de ejercicio mental. No te olvides, el que gestiona tus emociones es el cerébro, aunque te duela el corazón.
Algunos ya estamos.Apaga el ordenador, abre la ventana y mira al cielo. ¿Qué ves?
Gracias Tim pero... 

domingo, 24 de marzo de 2013

Nadie nos dijo que fuera fácil, todo lo contrario, nos inculcaron el sacrificio para cuando llegara poder combatirlo.  No temáis, estamos preparados, somos duros y el dolor lo conocemos, pero ellos son cobardes y mercenarios. No podrán con nosotros, cada vez queda menos, su derrota es inminente. El sol de nuevo sale y nos mira y nos ríe y nos carga de energía como siempre, nunca nos ha fallado. No importa, aguanta un poco mas, ya llega el tiempo en que las buenas personas como tú, disfrutarán de la vida soñada. Sí, sueña despierto, la crisis está acabando y se llevará a la mitad de los malos, el resto quedará para desconsuelo nuestro, pero otros como nosotros los vencerán en la próxima batalla. No es verdad que siempre ganen los mismos, ganan los que no desfallecen y aguantan pensando en criterios de igualdad y solidaridad. Hubo un tiempo, no hace tanto, que todo se compartía, que unos ponían el pan y la leche, mientras otros ponían la leña y las cacerolas, que unos ponían la poesía y la alegría y otros la luz y la escucha, que unos servían y otros les servían, que unos amaban y otros les amaban, que unos reían y otros reían con ellos, que...cuando uno estaba, no estaba él, estábamos todos.
No os rindáis, son pocos y mal avenidos, nosotros muchos y aguerridos.
Lo bueno siempre suma, únete a lo bueno, te queremos en el equipo, no hay límite en el juego.
Seguiremos entrenando, llegará en breve un nuevo partido.

miércoles, 20 de marzo de 2013

Me siento en el duro banco de la bolera y pienso, que duro es. 
Los compañeros de aventura se rien. ¿Le traemos un cojín al señorito?. 
No, gracias, todo lo contrario, hacía tiempo que no pensaba. 
¿Y en que estabas pensando?. 
Hubo un momento en el tiempo que los niños jugaban entre ellos, que los padres jugaban con los niños y que los abuelos vivían con los nietos. 
Eso también pasa ahora. 
No, antes los niños se aburrían, miraban a su alrededor y buscaban con que divertirse. Hoy son los padres los que gestionan su tiempo. Olaya te quedan cinco minutos para la clase de pintura y recuerda que en cuanto termines debes ir a la Calle Daoiz y Velarde 25 a la clase de filosofía...Me siento estresado hasta yo.
Los compañeros del futuro mantel, preguntan ¿te ha caído una teja en la cabeza?.
Sí, una teja árabe no te fastidia. Mis padres me permitían gestionar mi tiempo. Nunca hubiera respondido correctamente a Manzanedo sino hubiera estado en aquel colchón duro como una piedra con el calor de la gata de mi bisabuela Genara. Algunos no lo entenderéis, pero hubo un tiempo, en que los que nos criaron, no se quejaron nunca. Y yo les digo: gracias. Hoy tenemos futuro, porque ellos nos inculcaron el sacrificio, el no pensar en acostarse sin terminar el trabajo; y lo más importante pensando en el porvenir de sus hijos.
Pero como puedes decir que hay futuro si España está quebrada.
Cierto es que no todos hicieron sus deberes, pero los hubo que no sólo los hicieron sino que los marcaron con fuego en el muslo de la pierna, tal como nuestros ancestros marcaban al ganado para reconocerle en la pradera. Lo siento pero no habrá café para todos.





Y Seguimos con REBECA.


Año 3004. Nace Rebeca. Ella es el pensador central del centro tecnológico PAUMAR. Los científicos etíopes  Abigail y Bekur junto con el venezolano Lautaro y la coreana Sun Hee son sus padres. El nacimiento fue costoso, pero con el mecenazgo de la familia Angelopoulos, hoy siete de julio, el  comienzo de una nueva era es posible.

Papá ¿Donde has puesto el comcer?. 
¿El qué?.
 El comunicador cerebral. 
Yo no lo tengo, pregúntale a Marcos. 
Pero Marcos no está. 
No creo que tarde en venir. 
Paula es una joven de su tiempo, se define como alegre, animalista, terrenal, optimista y realista, pero eso de tener que esperar no lo lleva bien. Baja al búnker, la puerta está cerrada. Teclea en el aire 777 y se abre. Una vez en su interior, empuja el sillar más rojo y baja toda la habitación hasta la cota -16. Cuatro túneles subterráneos perfectamente iluminados se abren a sus ojos, ella decide elegir el más cercano. Un  artilugio cinemático aparece de repente.
Buenos días Jefa ¿Quiere que la lleve a su despacho?.
Hola Arci, sí rápido que llego tarde y hoy tengo comité.

Una luz tenue ilumina  la colmena número 25 de la cuarta arteria central de Rebeca, se trata de una pequeña luz que Lautaro necesita para poder trabajar en la modificación de un algoritmo complejo que no está dando los resultados deseados. Sun Hee observa como el viejo venezolano introduce los datos despacio, como si el mundo estuviera parado.
¡Dése prisa! ¿No ve lo que está pasando?.
El anciano ni se inmuta, sigue su trabajo con ganada indiferencia.
Ya os dije que el nacimiento era precipitado.
Díselo a los inversores.
Yo creía que tú eras científico como yo.
Y lo soy, Lautaro, pero tengo 19 años.
Y yo 91.
Por eso.
Perdona Sun Hee, pero estás equivocada si piensas que te debes al vil metal.
Que fácil lo dices cuando...
En ese instante, entran en la colmena Bekur y Abigail.
Debemos proceder al protocolo 71, dice con amarga tristeza Abigail.
Por encima de mi cadáver, responde Sun Hee. Sabíais lo que podía pasar y aceptasteis.
Pero podemos generar el fin de la humanidad, dice Bekur.
Quizás sea lo mejor que le pueda pasar, interrumpe Lautaro.
¿Cómo puede decir eso?, ninguno de nosotros lo va a permitir, comenta Bekur, mientras aparta al viejo con sus brazos. Quieta Sun Hee, nos han mandado introducir el 71 con paréntesis de 168 horas. 
La cosa entonces cambia. Contad conmigo.
Yo soy anciano y me queda poco pero no soy imbécil, lo que no soporto son los del dinero.
De repente una sonrisa se esboza en cada una de las cuatro personas. 
No hay tiempo que perder nos quedan 7 días y hay mucho que hacer.

¡Ten cuidado!. Tengo prisa, pero quiero llegar. Algo no va bien, piensa Paula. ¿Qué ocurre Arci?
No lo se, pero la inteligencia artifical no funciona, no puedo tomar ninguna decisión lógica. 
Paula no lo duda y desconecta al artilugio cinemático. Son muchos años con su compañero Arci. Nunca le ha fallado y la respuesta para ella sí ha sido lógica. Ahora piensa ¿porqué no he esperado a recoger el comcer? ¿donde estará mi hermano? ó mejor aún ¿dónde estoy yo?.
Preguntas, preguntas, se decía Pau. Debo poner en práctica lo que me han enseñado, sino ¿para que me ha servido?. De repente se le iluminan sus bellos ojos verdes, eureka, seguro que cambiando algunos programas Arci funciona bajo mando manual.




















lunes, 18 de marzo de 2013

Le miro y observo sus arrugas. Sus ojos me reflejan el sentir de su vida. Un trayecto complicado, con algunas lágrimas pero con mucha alegría. Me siento tan pequeño cuando pienso en su persona, me siento tan gigante cuando estoy en su presencia. Sus manos me acarician la mejilla, mientras sus cuentos y leyendas, despiertan en mi, nubes de ilusiones por cumplir. Azul infinito, envidia del mar y del cielo, que quisieron y no pudieron, reflejar el brillo singular de un nuevo despertar. Fortaleza inexpugnable, capaz de resistir, tantas guerras como llantos, con tal de protegernos. Sangre que nos dio y nos seguirá dando, sin esperar nada a cambio.
A nuestros padres.

jueves, 14 de marzo de 2013

Buenas amigos, hoy os voy a mostrar como va mi libro, espero os guste.


Año 3004. Nace Rebeca. Ella es el pensador central del centro tecnológico PAUMAR. Los científicos etíopes  Abigail y Bekur junto con el venezolano Lautaro y la coreana Sun Hee son sus padres. El nacimiento fue costoso, pero con el mecenazgo de la familia Angelopoulos, hoy siete de julio, el  comienzo de una nueva era es posible.

Papá ¿Donde has puesto el comcer?. 
¿El qué?.
 El comunicador cerebral. 
Yo no lo tengo, pregúntale a Marcos. 
Pero Marcos no está. 
No creo que tarde en venir. 
Paula es una joven de su tiempo, se define como alegre, animalista, terrenal, optimista y realista, pero eso de tener que esperar no lo lleva bien. Baja al búnker, la puerta está cerrada. Teclea en el aire 777 y se abre. Una vez en su interior, empuja el sillar más rojo y baja toda la habitación hasta la cota -16. Cuatro túneles subterráneos perfectamente iluminados se abren a sus ojos, ella decide elegir el más cercano. Un  artilugio cinemático aparece de repente.
Buenos días Jefa ¿Quiere que la lleve a su despacho?.
Hola Arci, sí rápido que llego tarde y hoy tengo comité.

Una luz tenue ilumina  la colmena número 25 de la cuarta arteria central de Rebeca, se trata de una pequeña luz que Lautaro necesita para poder trabajar en la modificación de un algoritmo complejo que no está dando los resultados deseados. Sun Hee observa como el viejo venezolano introduce los datos despacio, como si el mundo estuviera parado.
¡Dése prisa! ¿No ve lo que está pasando?.
El anciano ni se inmuta, sigue su trabajo con ganada indiferencia.
Ya os dije que el nacimiento era precipitado.
Díselo a los inversores.
Yo creía que tú eras científico como yo.
Y lo soy, Lautaro, pero tengo 19 años.
Y yo 91.
Por eso.
Perdona Sun Hee, pero estás equivocada si piensas que te debes al vil metal.
Que fácil lo dices cuando...
En ese instante, entran en la colmena Bekur y Abigail.
Debemos proceder al protocolo 71, dice con amarga tristeza Abigail.
Por encima de mi cadáver, responde Sun Hee. Sabíais lo que podía pasar y aceptasteis.
Pero podemos generar el fin de la humanidad, dice Bekur.
Quizás sea lo mejor que le pueda pasar, interrumpe Lautaro.





lunes, 11 de marzo de 2013

Gajos de naranjas azules, que sueñan tus lágrimas derramadas, al sonreír con la última locura, pensada por tu pareja. No los comas, déjalos, sabrosos son en tu inconsciente más consciente. Tu boca se recrea en el dulzor de tu cariño, tus colmillos se clavan como Quijanos en la sombra de la noche. Tus latidos se escuchan sin descanso, como si no hubiera sonido. Tu piel despierta el instinto del simio que fuimos, mas tus palabras evocan la plenitud del tiempo vivido. Playas amarillas sirven como reclamo de nuevas cometas soltadas al aire, sin ataduras. Meandros erosionados por la fuerza del amor que sentimos. Desiertos llenos de alegría vacían nuestra tristeza. Arrecifes de color iluminan nuestras vidas. Acantilados alcanzados crecen con nuestros esfuerzos. Necesitamos abrazos de dolor que generen sonrisas de color. Luces diminutas que se encienden y se apagan, serán gnomos de la gnomia, ó quizás son más pequeñas, y se apagan y se encienden pero mucho más despacio, son entonces duendes de Lentor. Sean quienes fueren ó fueran quienes sean, siguen siendo cuerdos tus pensamientos locos.

miércoles, 6 de marzo de 2013

No claudiquéis, aquí nos tenéis. Por difícil que sea el futuro, la esperanza os ayudará. No estáis solos. Levantar la cabeza y mirar lo grandioso que es el universo y lo pequeño que es el mundo en que vivimos. Luchar, el destino no está escrito, sino es hoy, será mañana. Apretar los dientes, no será fácil, pero vamos en grupo. Sonreír, aunque no tengáis ganas, hablar aunque no sepáis el idioma, abrazar aunque no seáis familia. Lo primero que te digo es cuéntamelo todo, no tengas prisa, la vida no se para porque desenchufes el cable conectado al mechero del coche que da energía al último móvil que te vendieron para estar siempre conectado. El problema no es de batería, ni siquiera de tecnología, el problema es de velocidad cuantitativa capaz de ser asimilativa. Lo segundo que te digo es, sigue, no pares de hablar, expúlsalo todo, el aire lo absorberá. Me imagino que sigues intranquilo, pero tus palabras reconocerás. Seguido, salta, brinca, grita, incluso si quieres da patadas al aire, seguro que no se molestará. Ahora puede que vuelva el vacío, entonces abraza, llora, gime, canta, pero en un pis pas tus labios sonreirán, no lo dejes escapar, pinta en tus espejos grandes curvas de color que reflejen como nadie la sonrisa del pastor. Respira, siente como el aire que no ves, impulsa como nadie el mundo en el que crees. Vuelve a la vida, pero antes de encender el celular, mira alrededor, los problemas siguen nos dirás, pero si sigues mirando observarás, que tus problemas solo tuyos no serán. Tus ideas deberás cambiar, el consumismo no es tu felicidad. Amigos deberás buscar y el recogimiento nunca deberás dejar. Cada vez que vuelva el vacío, grita, alguien te escuchará. No será mañana, pero será.

martes, 5 de marzo de 2013

Exageradamente grande, sin necesidad de pequeñez, lo mejor de lo mejor, lo bueno sin aliño, así es él. Nacido en pleno invierno, cuando la nieve se dejaba ver. Tranquilo como ninguno, a su casa vinieron a verle nacer. Con rizos en el pelo, perdidos en el ayer, sin necesidad de gorro, pensándolo alguna vez. Nuevos sonidos oyen sus oídos, viejos camiones ven sus ojos saltones, calientes alpargatas disfrutan sus  patas. Futuro presente tiene en mente, pasado vivido tiene en el olvido. Esperanza merecida le será reconocida. Realidad colorida sentirán sus papilas gustativas. Etapa terminada, adiós en la memoria, sin remordimientos,  llega un nuevo ciclo. Nunca lo sabré ya que no lo fui, pero tú no lo sabrás y yo sí que lo fui.

lunes, 4 de marzo de 2013

Os necesitamos. Exigir vuestra presencia. Somos lo que fuimos porque lo vivimos. Ellos que no tienen, dicen que los quieren. Los que los conocen siempre los tienen. Faltan a doquier, ya no se les ve. Medianos y grandes, incluso pequeños, como Ruben. La mesa está puesta, no faltan sillas, faltan sonrisas y sobran lamentos. No te lo pienses, lo necesitas, son nuestro apoyo, incluso nuestra caída, pero en el fondo somos lo mismo. Nos entendemos y pegamos, nos reímos y lloramos, nos perdemos y encontramos. Forman nuestro carácter, nos mejoran como personas, nos ayudan con nuestros padres. Nos cuidan y nos chinchan. Podrán faltar caminos, luces, ultramarinos, hospitales e incluso maestros en los colegios. Crecerán y algunos los querrán separar, pero ellos no lo debieran acatar. Al final, los tiempos no volverán, aunque en tus sueños sí estarán.

domingo, 3 de marzo de 2013

El tiempo, ese ángel de la guarda, que a veces pasa despacio y otras veces no nos llega. Tiempos, nunca iguales, muy distintos, pero siempre momentos. Horas y segundos capaces de forjar  nuevas ocasiones. Cronómetros de ilusión que llegan a la meta. Recipientes simétricos de arena, unidos sin descanso por un tronco que separa. Cuadrante solar que marca la sombra mediante el gnomon que somos. Días que quedan, semanas que fueron, meses que vienen, años ganados. Ciclo medible, sincero en esmero, soñado de día con ojos abiertos. Pelos de punta que saben que estás y nunca te vas. Lapsus queridos, etapas futuras, espacios recorridos. No fue ayer, ni será mañana, sino hoy, cuando el tiempo nos acoja, como siempre, sin espera, no nos deja. Nueve años, tres mil doscientos ochenta y cinco días, setenta y ocho mil ochocientas cuarenta horas, cuatro millones setecientos treinta mil cuatrocientos minutos, doscientos ochenta y tres millones ochocientos veinticuatro mil segundos. Feliz cumpleaños tiempo.

viernes, 1 de marzo de 2013

En la soledad del segundo que te queda, cuando miras el reloj y se para el segundero, pocos piensan en cambiar la pila. Tú, sin embargo, recordarás el momento. Si ellos nos lo dieron todo y nos lo siguen dando, ¿por qué no se la cambiamos?. Sobra la pregunta, me pongo manos a la obra, no necesito nuevo instrumento, sé tocar la guitarra. Llaman al portal.¿Quién es?. Propaganda, ¿me puede abrir?.Rum,rum,rum, gracias. Abro el cajón y descubro la sota de espadas que perdimos en la partida que ganamos aquella nochebuena. Suena el teléfono, miro el número, es mi hermano. Dime Juan. Buenas Señor, el viernes cena de la hermandad. Sin problema, ¡ah, por cierto! he encontrado la carta que faltaba. Nunca lo dudé, siempre consigues lo que te propones. Rinnng, rinnng, te dejo me llaman al timbre. Adios. ¿Quién es?. Propaganda. Abro la puerta. Buenas Señor. Hola, me dice. Somos la mayor compañía europea en suministro de aire drenado por partículas acuáticas encontradas en el mar muerto. Me alegro. Si usted nos contrata, los primeros tres meses no pagará nada, respirará aire puro y le regalaremos un reloj digital, capaz de informarle de donde está, de su estado de salud, del tiempo que hace y del que hará, ¿qué le parece?. Pues que voy aprovechar el ascensor. Cierro la puerta, marco la letra B y le digo, voy a donde mi amigo Angel, ¿pero?, sí, voy a comprar una pila, ¿para?, se me acaba de parar el reloj.Nosotros se lo regalamos. Cierro los ojos y recuerdo el momento, era mi primera comunión. Yo ya tengo reloj, sólo necesito una pila.